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Intento descifrar las ideas de mi cabeza, las tengo a montones y están esparcidas pero no se encontrar el hilo que las conecta, no se como empezar mi historia. 
Ordeno la habitación convencida que si deja de haber caos fuera, dejara de haberlo dentro pero no sirve de nada. Dejo lo que estaba haciendo , decido darme una ducha fría. Llevo horas teniendo orgasmos y siento que mi cuerpo esta caliente y mi mente deseosa de plasmar palabras. El agua recorre mi cuerpo y enfría mi cabeza, creo que ya empiezo a estar lista pero no, algo falla. 
Voy a por vino al supermercado de siempre ya un poco mas sobria de tanto sexo, las manos han dejado de temblarme. 
Y cuando me observo y me veo con esa bolsa llena de botellas me recuerdo a Bukowski, ese momento me conecta a el. 
Y me parece irónico, gracioso. El espacio tiempo solo lo salva mi cabeza, la imaginación.


Estoy vestida, estoy fría. Pero aun no abro la botella. 
Me siento en mi ordenador y describo mi caos, pero no empiezo ninguna historia. 
Parece ser que no estoy preparada , aún.